He recibido un correo en donde me comparten la alegría de la llegada de un bebé, sin embargo, también se disculpan por compartir conmigo la noticia porque suponen que “a mí eso de los hijos no me va”. He estado pensando cuál habrá sido la causa para que pensaran eso de mí. Acaso habrá sido mi camiseta de “¡Viva San Herodes!” o habrá sido mi apariencia, difícil de imaginar en un rol tan tradicional como el que la gente insiste en ubicar a la madre.
Es verdad que en muchas ocasiones me han molestado las situaciones en las que me veo envuelta al convivir con mis amigas que se han convertido en madres, pero es solamente falta de costumbre. Sin embargo, ahora que lo pienso, esto de lo de los niños creo que sí es para mí, justo ahora una niña, hija de una compañera de trabajo, a la que le prometí cuidar mientras ella sale por un par de horas, se encuentra en mi computadora viendo una película. De hecho ya tengo en experiencia de babysitter porque desde que empecé a trabajar la mayoría de los hijos de mis compañeros de trabajo se han acercado a mí, así, al cabo de cinco años, he convivido con niños de cuatro hasta diez años y me he divertido bastante.
Ahora sí que no entiendo porque la gente tiende a pensar que aborrezco a los niños, en realidad no lo hago, por lo general me parecen más agradables y atentos que muchos adultos que conozco. De hecho lo único malo que veo en algunos de ellos es que se parecen enormemente a sus padres y nada más hay que ver cuantas personas egoístas, mal intencionadas, deshonradas y cínicas son padres.
En fin, supongo que si mis condiciones biológicas, económicas y emocionales me lo permiten, algún día me convertiré en madre, aunque algunos de ustedes no lo crean.
4 comments:
Bienvenida al club.
Mi querida Eileen, disculpa lo malo. Es que llegué a esa errónea conclusión cuando el año pasado, dos días después de tu cumpleaños, leí un escrito tuyo titulado “Me gustan los bebés…pero en fotos” Aunque sé por tus pensamientos y por tu aclaratoria que el deseo de tenerlos o no, es más circunstancial que emocional.
¡Ah! Te comento. Mientras escribía estas líneas mi hija estaba a mi lado con una linda sonrisa, esa que te hace pensar: ¡QUE BELLA ES LA VIDA!
Besos y abrazos
CM Venezuela
CM Venezuela
¡Ah! Y no le pares a la apariencia ni a lo tradicional. Cuando yo tuve la dicha de ser padre tenía el cabello largo, y usaba tres zarcillo y muchas ganas de hacerme tatuajes.
Mi hija todavía llora cuando me corto el cabello porque cinco de sus siete años, toda una vida para ella, me conoció con el cabello que me pasaba de los hombros.
Los zarcillos aun me los coloco, las ganas de los tatuajes aun las mantengo pero mi cabello …te digo que lo tengo corto, corto y mañana me paso la maquina con el peine 00 (al ras) y la hojilla
Te quiero tal como eres, si no fueses así …bueno, igual te querría. je,je,je
De nuevo besos y abrazos
CM Venezuela
Querida tocaya, es cierto, me parece que pertenecemos al raro club que todavía piensa que tener hijos requiere de una pensada decisión y no es el premio de una rifa. Saludos.
CM, no te preocupes, es la idea que tiene mucha gente sobre mí. Yo también te estimo tal y como eres. Saludos a tí y a tu hija.
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